El Valle de México atraviesa por una grave crisis hídrica que pondría en riesgo el abasto de los próximos 40 años para más de 23.6 millones de personas. De acuerdo con un diagnóstico realizado por 20 expertos, se necesitaría una inversión de 97,000 mdp para combatir falta de agua.
De hecho, el informe Perspectivas del Agua en el Valle de México. Orientaciones hacia la seguridad hídrica, fue realizado a partir de estudios existentes y programas hídricos regionales elaborados por la Comisión Nacional del Agua (Conagua). En él, los expertos destacaron que los 97,000 mdp se necesitarían en los próximos 15 años para revertir los síntomas de inseguridad hídrica y acercase a un manejo sustentable.
De acuerdo con el análisis, estos recursos deben invertirse en seis áreas: generar un manejo sustentable de acuíferos, saneamiento, captación de agua de lluvia y monitoreo, lo que requiere 25,000 millones de pesos.
Además de incrementar la seguridad hídrica ante sequías e inundaciones a través de mitigación del impacto de inundaciones y sequías, lo cual necesita 3,000 millones de pesos. Asimismo, es necesario hacer más eficientes los servicios de abastecimiento de agua potable, alcantarillado y saneamiento, al generar una nueva fuente de abastecimiento con una inversión de 16,000 millones de pesos.
Por si fuera poco, los expertos destacaron la urgencia de sustituir las tuberías y control de fugas, para lo que se requerirían más de 40,500 millones de pesos.
Asimismo, dijeron que serán necesarios cerca de 4,000 millones de pesos para robustecer las capacidades científicas y tecnológicas del sector con estudios y proyectos y formación de capacidades.
Principales retos para combatir la falta de agua
Según el estudio, el diagnóstico del Sistema de Aguas del Valle de México enfrenta retos significativos. Aunque existen desafíos que obedecen a condiciones naturales de la cuenca, también están presentes deficiencias históricas en los modelos de gobernanza del agua. Sin contar el incremento no regulado de las ciudades, entre otros factores sociales, económicos y culturales.
Los datos muestran que las deficiencias en la prestación de servicio de agua y saneamiento de la zona metropolitana van desde la falta de cobertura en zonas rurales y periurbanas, así como en la desigualdad en el suministro y servicio discontinuo.
Asimismo, las estaciones hidrometeorológicas cubren únicamente 60% del agua requerida, al tiempo que otros sistemas de suministro ha sobrepasado su vida útil, ejemplo de ello el Sistema Cutzamala, el cual se construyó para un horizonte de 20 años y lleva 40 años en operación.
Por último, se advirtió que es insostenible la sobreexplotación de los acuíferos, ya que en la actualidad, se extrae 2.5 veces más agua del acuífero de la que se recarga de manera natural.
