Microsoft anunció que dejará de ofrecer Teams como parte de su suite productiva Office 365 en todo el mundo. La medida fue aplicada en la Unión Europea y Suiza hace seis meses como parte de una estrategia para evitar una sanción antimonopolio.
La aplicación de chat, llamadas y videollamadas de Microsoft se añadió a la paquetería ofimática de la compañía en 2017 sin costo adicional. Más tarde sustituyó a Skype for Business.
La integración ha sido investigada por la Comisión Europea desde 2020, cuando Slack presentó una demanda que argumentaba que comerciar de manera conjunta ambos productos entregaba a Microsoft una ventaja injusta.
La denuncia de la plataforma propiedad de Salesforce desencadenó un proceso de evaluación. Microsoft intentó frenarlo y comenzó a vender por separado ambos productos en la Unión Europea y Suiza el 1 de octubre del año pasado.
Microsoft intenta evitar una multa antimonopolio
La empresa confirmó en horas recientes que iba a introducir una nueva línea de paquetes empresariales de Microsoft 365 y Office 365 que no incluyen Teams en otras regiones del mundo en donde tiene operaciones.
“Para garantizar la claridad para nuestros clientes, estamos ampliando las medidas que tomamos el año pasado para desagregar Teams de M365 y O365 en el Espacio Económico Europeo y Suiza a los clientes a nivel mundial”, comunicó un portavoz de Microsoft.
La decisión tomará efecto a partir de este lunes 1 de abril. Los clientes actuales podrán mantener todos los beneficios que incluye su contrato hasta que éste pierda vigencia. Los nuevos clientes empresariales podrán adquirir planes de Office sin Teams por precios que van de 7.75 y 54.75 dólares. La app de comunicación tendrá un precio separado de 5.25 dólares. Las tarifas pueden variar en función del país y la moneda en curso.
Microsoft ha pagado un acumulado de 2,400 millones de dólares en multas antimonopolio de la Unión Europea durante los últimos 10 años, por vincular o agrupar dos o más productos. Con la puesta en marcha de nuevos marcos legales como la Ley de Servicios Digitales, la empresa corre el riesgo de hacerse acreedora a una multa de hasta el 10% de su facturación anual si las autoridades determinan que está violando las leyes de competencia.
