Reuters.- Las acciones de Volkswagen caían el miércoles tras un aviso de beneficios nocturno provocado en parte por el posible cierre de una planta de Audi y una caída del 3,8% en las ventas del segundo trimestre, lastradas por China.

Las entregas en China se redujeron casi un 20%, en medio de un mayor descenso de las ventas de coches con motor de combustión, que siguen constituyendo la mayor parte de la gama de Volkswagen en el país.

Dado que China se dirige rápidamente hacia un mercado totalmente eléctrico, Volkswagen ha afirmado que en los próximos años aumentará su oferta de vehículos alimentados por baterías y dará prioridad a la rentabilidad, incluso cuando los fabricantes locales de automóviles rivales reduzcan los precios hasta un 50%. “No esperamos un año fácil”, declaró un portavoz a la prensa.

La compañía rebajó su previsión de rentabilidad operativa sobre las ventas para 2024 del 7-7,5% al 6,5-7% y dijo que la marca Audi estaba considerando cerrar su planta de Bruselas, que emplea a unas 3.000 personas, debido a la baja demanda de sus coches eléctricos de gama alta.

Las acciones de Volkswagen bajaban un 1,13% a 105,4 euros a las 1030 GMT, contribuyendo a una caída del 5,5% en lo que va del año.

Mudanza a México de Volkswagen

El futuro de la planta de Audi en Bruselas se puso en duda a principios de este año después de que el fabricante de automóviles dijera que el modelo que seguiría al Q8 e-tron se construiría en México.

El aumento de los pedidos de modelos más nuevos, como el Q6 e-tron, que saldrá al mercado este año, ha provocado una fuerte caída en el interés por el antiguo Q8 e-tron producido en Bruselas, dijo Audi el martes.

Audi ha luchado por alcanzar a sus competidores BMW y Mercedes en la transición a los vehículos eléctricos. Audi ha prometido una renovación en 2024 y 2025 con más de 20 nuevos modelos EV y con motor de combustión, seguidos de modelos sólo EV a partir de 2026.

Volkswagen, que tiene una fuerte representación sindical, no ha cerrado una planta en cuatro décadas, pero los analistas dijeron que el fabricante de automóviles estaba bajo presión para reducir cantidades significativas de exceso de capacidad de producción.