GNP Seguros informó que desde 2019 ha atendido más de 1,600 siniestros relacionados con riesgos hidrometeorológicos. La cifra representa el 5.5% del total de eventos del ramo. La empresa ha pagado más de 462 millones de pesos (mdp) en coberturas.
Guerrero (390), Ciudad de México (238), Nuevo León (163), Estado de México (124) y Baja California (123) son los tres estados que más incidentes han reportado entre 2029 y mayo del año en curso. Las entidades a las que GNP pagó mayores montos son Guerrero (251 mdp), Tamaulipas (61.5 mdp), Jalisco (24 mdp), Ciudad de México (23 mdp) y Baja California Sur (20 mdp).
La firma compartió que en el último lustro el caso más caro pagado para un hogar por daños a causa de eventos hidrometeorológicos fue de 7.1 mdp. En el rubro de negocio y multiempresarial, las cifras ascendieron a 6 mdp y 49 mdp, respectivamente. GNP Seguros dio a conocer que en su cartera de Daños del total de pólizas vigentes al 2024 sólo el 71% cuenta con cobertura para fenómenos como lluvias, granizo, tormentas, inundaciones y huracanes.
GNP y las aseguradoras ante los fenómenos naturales
De acuerdo con los pronósticos de la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA) en 2023 se estimó la llegada de al menos 26 ciclones entre el Pacífico y Atlántico, mientras que en 2024 se esperan al menos 35 ciclones, lo que representa un incremento de al menos 9 eventos más respecto a 2023.
La Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS) explica que los riesgos de la naturaleza en México no sólo son siniestros de riesgos hidrometeorológicos causados por grandes fenómenos naturales como ciclones o huracanes, sino que también las lluvias e inundaciones causan afectaciones. Al respecto, la organización reportó que, tan solo en el primer trimestre de 2024 los riesgos catastróficos representaron el 20% de la siniestralidad en el ramo, aun sin ser temporada de lluvias, con una cifra poco menor a 1,961 mdp por daños.
La AMIS también destacó que, en 2022 (año en el que no se presentaron huracanes mayores) el 46% de los daños cubiertos se debieron a inundaciones, granizadas y daños por lluvia con una cifra pagada cercana a los 1,000 mdp.