Reuters.- Goldman Sachs anunció el martes que ha introducido un nuevo Índice de Estrés Financiero (IEF) que, aunque se ha endurecido en los dos últimos días de turbulencias en los mercados, se mantiene en niveles relativamente normales según los estándares históricos.
La mayor parte del endurecimiento se ha debido a los niveles sorprendentemente altos de volatilidad esperada en los mercados de renta variable y renta fija, señalaron los economistas de Goldman en una nota a clientes. Las condiciones de los mercados de financiación a corto plazo se mantienen estables en líneas generales.
“Así pues, aunque la tensión del mercado es notablemente superior a la de hace una semana, nuestro IEF sugiere que hasta la fecha no se han producido perturbaciones graves en el mercado que obliguen a los responsables políticos a intervenir”, señaló Goldman.
La liquidación de las operaciones de “carry trade” en yenes a corto plazo, combinada con unos datos de empleo en Estados Unidos más débiles de lo esperado el viernes y unos beneficios decepcionantes de las principales empresas tecnológicas, desencadenó una ola de pánico en la renta variable mundial.
Esto hizo que los inversores se apresuraran a buscar la seguridad de los bonos del Tesoro de Estados Unidos, forzando sus rendimientos a la baja en medio de preocupaciones sobre la capacidad de los mercados financieros para hacer frente a un riesgo elevado.