Reuters.- El presidente ejecutivo de Boeing, Kelly Ortberg, presentó el miércoles un plan de reestructuración en el que aboga por un “cambio cultural fundamental” en el fabricante de aviones, cuyas pérdidas trimestrales se dispararon hasta los 6.000 millones de dólares debido a una huelga paralizante.
La empresa acumula pérdidas de casi 8.000 millones de dólares en lo que va de año, debido a la interrupción de la producción de sus aviones 737 MAX, 777 y 767 a raíz de la huelga y a una división de defensa y espacio en crisis. Las acciones de Boeing cedían un 1% en las operaciones previas a la apertura del mercado.
En una carta, Ortberg subrayó la necesidad de mejorar el rendimiento de su negocio de defensa y sus programas 737 MAX y 777, al tiempo que se estabiliza en general Boeing, que se encuentra “en una encrucijada” después de que los fallos en su rendimiento decepcionaran a los clientes y erosionaran la confianza.
“Este es un gran barco que tardará algún tiempo en virar, pero cuando lo haga, tendrá la capacidad de volver a ser grande”, dijo Ortberg a los empleados en un mensaje con comentarios preparados para su primera llamada de resultados como presidente ejecutivo.
Boeing en medio de una crisis
Las declaraciones de Ortberg llegan después de que se anunciaron planes de recortes significativos en el marco de una huelga de unos 33.000 trabajadores que lleva más de un mes afectando a la producción de su avión 737 MAX, el más vendido, y de los modelos 767 y 777 de fuselaje ancho.
El exejecutivo de Rockwell Collins, que asumió la dirección del fabricante de aviones estadounidense en agosto, se mostró esperanzado en que se apruebe una nueva propuesta de contrato que votarán el miércoles más trabajadores en huelga, aunque los analistas señalan que la ratificación no es segura.
Se trata de un día crucial para la compañía, afectado también por las consecuencias de un límite impuesto por el regulador a la producción de aviones MAX tras un incidente con un panel en pleno vuelo.