El contar con recursos y que estos se encuentren disponibles de tal manera que pueda enfrentarse una urgencia es indispensable y más aún en tiempos de incertidumbre, por lo que es importante desarrollar el hábito del ahorro y depositar estos recursos en instituciones financieras formales, donde estén seguros y siempre disponibles, como son los bancos.
En México, de acuerdo con la Encuesta Nacional sobre Salud Financiera (ENSAFI), poco más de la mitad de los mexicanos mayores a 18 años tiene algún tipo de ahorro.
Sin embargo, es crucial que este ahorro se encuentre en instituciones financieras formales, reguladas y supervisadas, por la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) y la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios (Condusef).
Sin embargo, 41 por ciento de la población adulta prefiere recurrir a métodos de ahorro informales, como es el caso del ahorro en casa con 74 por ciento, tandas con 22 por ciento y cajas de ahorro con 16 por ciento.
Ello, sin considerar que estos recursos, al tenerlos en casa, van perdiendo valor en el tiempo al no generar ningún rendimiento, o desaparecer de un día para otro al encontrarse en manos de personas o seudo instituciones que operan fuera del sistema financiero formal. De ahí la importancia de tener estos recursos al resguardo de instituciones financieras formales, como es el caso de los bancos, que además de estar regulados por la CNBV, cuentan con un seguro de depósitos que garantiza estos recursos.
De hecho, con base en la ENSAFI 2023, del 43 por ciento de la población que prefiere ahorrar de manera formal, el 18 por ciento lo hace en una cuenta de ahorros.
De acuerdo con expertos financieros, el poder abrir una cuenta de ahorros de manera digital impulsa aún más la inclusión financiera, por su rapidez, sencillez y que puede hacerse desde cualquier lugar a través de las apps.
Entre las cuentas digitales se encuentra la de Banco Sabadell una de las opciones 100 por ciento digitales y que se puede abrir en cuatro sencillos pasos; y solo se requiere tener a la mano el INE vigente, y ser titular de una cuenta CLABE de otro banco.
La apertura de cuentas se ha visto fortalecida en los años más recientes, sobre todo en 2020, cuando se tuvo la mayor apertura de cuentas de débito con 23.9 por ciento, lo cual se explica en buena medida por el confinamiento de la pandemia, que incentivó el volumen de transacciones en línea, lo que se prevé continúe creciendo, destacó Deloitte.