Fundación AlEn e Isla Urbana celebraron hoy la inauguración de “Néctar de Nube”, un sistema pionero de purificación de agua de lluvia que beneficiará a las escuelas públicas en México. Este primer sistema fue instalado en el Jardín de Niños Griselda Ruiz Lozano, ubicado en Apodaca, Nuevo León, como parte de un esfuerzo conjunto por garantizar el acceso a agua potable y fomentar la educación ambiental entre las comunidades escolares.
“Néctar de Nube” forma parte del programa “Agua en mi escuela” de Grupo AlEn, que busca aprovechar el agua de lluvia mediante un proceso de captación y purificación, asegurando su calidad para el consumo humano. Este sistema tiene una capacidad de purificar hasta 500 litros de agua al día, equivalente a 27 garrafones, ofreciendo a los estudiantes un suministro constante, limpio y gratuito.
Mariel Jiménez Tamez, directora de Sostenibilidad y Recursos Humanos de Grupo AlEn, señaló que “Néctar de Nube es un paso más en nuestro compromiso por mejorar la seguridad hídrica en las escuelas públicas de México, brindando acceso a agua potable y fomentando la educación ambiental para las futuras generaciones”.
El proyecto no solo se enfoca en la instalación del sistema, sino que también incluye talleres educativos dirigidos a estudiantes, padres de familia y docentes. Estas actividades buscan crear conciencia sobre el cuidado del agua y promover prácticas sostenibles. Ana Paula Mejorada, directora de Escuelas de Isla Urbana, destacó que “la educación es clave para lograr un cambio de conciencia sobre el uso responsable del agua, y este sistema nos permite reforzar este mensaje en las comunidades escolares”.
La directora del Jardín de Niños Griselda Ruiz Lozano, Verónica Galicia, expresó: “Nos llena de satisfacción saber que nuestros estudiantes podrán acceder a agua potable purificada directamente en la escuela. Este sistema es una verdadera bendición”.
Con iniciativas como “Néctar de Nube”, Fundación AlEn e Isla Urbana reafirman su compromiso con el bienestar social y la sostenibilidad, demostrando que el acceso a agua limpia y la educación ambiental pueden marcar la diferencia en el presente y futuro de los niños mexicanos.
