Reuters.- Las autoridades chinas han acordado emitir bonos públicos especiales por valor de 3 billones de yuanes (411.000 millones de dólares) el próximo año, según dos fuentes, lo que supondría la mayor emisión registrada, en el marco de los estímulos fiscales para reactivar una economía tambaleante.
El plan de emisión de deuda soberana para 2025 supondría un fuerte aumento respecto al billón de yuanes de este año y se produce cuando Pekín se prepara para suavizar el impacto de un esperado aumento de los aranceles estadounidenses a las importaciones chinas con el regreso de Donald Trump a la Casa Blanca en enero.
Los ingresos se destinarán a impulsar el consumo a través de programas de subsidios, la modernización de equipos por parte de las empresas y la financiación de inversiones en sectores avanzados impulsados por la innovación, entre otras iniciativas, dijeron las fuentes.
Las fuentes, conocedoras de las conversaciones, no quisieron dar su nombre debido a lo delicado del asunto.
La Oficina de Información del Consejo de Estado, que gestiona las consultas de los medios de comunicación en nombre del Gobierno, el Ministerio de Finanzas y la Comisión Nacional de Desarrollo y Reforma (NDRC, por sus siglas en inglés), no respondió de inmediato a una solicitud de Reuters para hacer comentarios.
Los rendimientos del Tesoro chino a 10 años CN10YT=RR y 30 años CN30YT=RR subían 1 punto básico (pb) y 2 pb, respectivamente, tras conocerse la noticia.
Las perspectivas de China
La emisión especial de bonos del Tesoro prevista para el próximo año sería la mayor registrada hasta la fecha y subraya la voluntad de Pekín de endeudarse aún más para contrarrestar las fuerzas deflacionistas en la segunda mayor economía del mundo.
China no suele incluir bonos especiales a muy largo plazo en sus planes presupuestarios anuales, ya que considera este instrumento como una medida extraordinaria para recaudar fondos destinados a proyectos específicos u objetivos políticos según sea necesario.
Como parte del plan del próximo año, alrededor de 1,3 billones de yuanes que se recaudarán a través de bonos especiales del Tesoro a largo plazo financiarían “dos grandes” proyectos y “dos nuevos” programas, dijeron las fuentes con conocimiento del asunto.
Las “nuevas” iniciativas consisten en un programa de subvenciones para bienes duraderos, en el que los consumidores pueden cambiar sus coches o electrodomésticos viejos y comprar otros nuevos con descuento, y otro que subvenciona la modernización de equipos a gran escala para las empresas.
Los programas “grandes” se refieren a proyectos que aplican estrategias nacionales como la construcción de ferrocarriles, aeropuertos y tierras de cultivo y crean capacidad de seguridad en zonas clave, según documentos oficiales.
El 13 de diciembre, el planificador estatal NDRC dijo que Pekín había asignado íntegramente todos los ingresos procedentes de los bonos especiales del tesoro ultralargos de 1 billón de yuanes de este año, de los que alrededor del 70% financiarán los “dos grandes” proyectos y el resto se destinará a los “dos nuevos” planes.