Reuters.- La orden del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de pausar el gasto de las leyes climáticas y de infraestructuras del país es una oportunidad para que Europa atraiga inversiones en tecnologías limpias, según ha declarado a Reuters el secretario de Estado de Clima de Polonia.

Trump ordenó la semana pasada una pausa en los fondos de la Ley de Reducción de la Inflación (IRA, por sus siglas en inglés) y la Ley de Inversión en Infraestructuras y Empleos, planes de la era Biden para el gasto y los créditos fiscales en industrias limpias. La Casa Blanca dijo que la pausa apunta a programas que desalientan el desarrollo de combustibles fósiles o apoyan los vehículos eléctricos.

“Creo que es nuestro momento. Es nuestra oportunidad, porque muchas empresas con las que he hablado se quejaban del IRA”, dijo Krzysztof Bolesta, secretario de Estado del Ministerio de Medio Ambiente y Clima.

Bolesta afirmó que las empresas habían advertido de que trasladarían sus inversiones a Estados Unidos para evitar las gravosas normativas europeas y beneficiarse de las subvenciones del IRA, que inicialmente pretendía proporcionar unos 400.000 millones de dólares de ayudas. “Ahora creo que el dinero será más difícil de conseguir en Estados Unidos y tenemos nuestra oportunidad, así que espero de verdad que no la echemos a perder”, dijo en una entrevista.

Energías limpias entre la turbulencia política

No está claro cuántos fondos se verán directamente afectados por la orden IRA de Trump. El gobierno de Biden había dicho que la gran mayoría de las subvenciones para programas de energía limpia, por ejemplo, ya se habían concedido.

Pero el giro de 180 grados del Gobierno estadounidense en su apoyo a las inversiones industriales limpias coincide con la preparación en Bruselas de una nueva política industrial de la Unión Europea, que se publicará el mes que viene, destinada a apoyar a la industria en su descarbonización.

Los borradores de documentos filtrados y fuentes de la UE sugieren que este paquete de “acuerdo industrial limpio” incluirá normas más sencillas y rápidas para las inversiones en ayudas estatales a la industria y normas de contratación pública que den preferencia a las versiones de fabricación local de determinadas tecnologías.

Bolesta dijo que una prioridad es simplificar las complejas normas de la UE, incluido el arancel fronterizo sobre el carbono (CBAM), que impondrá costes de emisiones de CO2 a los bienes importados a partir de 2026. “Oímos voces alentadoras de que el CBAM se simplificará como parte del Acuerdo Industrial Limpio”, dijo. “Porque al trabajar en su aplicación vemos que podría causar mucha burocracia, especialmente para las empresas más pequeñas”.