Reuters.- China aumentó el viernes sus aranceles sobre las importaciones estadounidenses hasta el 125%, contraatacando la decisión del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de subir los aranceles sobre los productos chinos hasta el 145%, subiendo las apuestas en una guerra comercial que amenaza con poner en peligro las cadenas de suministro mundiales.
La subida se produce después de que la Casa Blanca mantuviera la presión sobre la segunda economía mundial y el segundo mayor proveedor de importaciones estadounidenses al aumentar adicionalmente sus aranceles, tras haber pausado la mayoría de los impuestos “recíprocos” a decenas de otros países.
“La imposición por parte de EEUU de aranceles anormalmente elevados a China viola gravemente las normas comerciales internacionales y económicas, las leyes económicas básicas y el sentido común, y constituye una intimidación y coacción totalmente unilaterales”, dijo el Ministerio de Finanzas chino en un comunicado.
Crece la disputa entre China y EE UU
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció este miércoles una pausa de 90 días en la aplicación de aranceles para aquellos países que, según él, han evitado tomar represalias comerciales contra su plan arancelario y han optado por entablar negociaciones con Washington.
A través de un mensaje en su red social Truth Social, Trump afirmó que “más de 75 países” han mostrado disposición a negociar y no han respondido con medidas comerciales adversas. “He autorizado una PAUSA de 90 días y una reducción sustancial del arancel recíproco durante este período del 10%, también con efecto inmediato“, indicó el mandatario.
Sin embargo, la tregua no se extiende a China. Trump elevó significativamente la presión sobre el gigante asiático al incrementar sus aranceles hasta un 125%, también con efecto inmediato.