Reuters.- La semana de turbulencias desatadas por los aranceles del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, mostraba pocas señales de amainar el viernes, con los mercados cayendo de nuevo y los líderes extranjeros tratando de resolver cómo responder a un desmantelamiento del orden comercial mundial.
Los castigados mercados financieros recibieron un breve respiro el miércoles, cuando Trump decidió suspender los aranceles a decenas de países durante 90 días. Sin embargo, su escalada en la guerra comercial con la segunda economía mundial, China, ha avivado el temor a una recesión y a nuevas represalias.
El secretario del Tesoro de Estados Unidos, Scott Bessent, trató de calmar a los escépticos diciendo en una reunión de gabinete el jueves que más de 75 países querían iniciar negociaciones comerciales y el propio Trump expresó su esperanza de llegar a un acuerdo con China.
Pero la incertidumbre entretanto prolongó algunas de las operaciones más volátiles desde los primeros días de la pandemia del covid-19. El índice S&P 500 terminó el jueves con una caída del 3.5% y ahora ha perdido cerca del 15% desde su máximo histórico de febrero. Los índices asiáticos siguieron a Wall Street a la baja el viernes, con el Nikkei japonés retrocediendo casi un 5% y las acciones de Hong Kong dirigiéndose hacia la mayor caída semanal desde 2008.
La venta masiva de bonos del Tesoro de Estados Unidos, que atrajo la atención de Trump antes de la pausa del miércoles, volvió a acelerarse el viernes, con el rendimiento del bono a 10 años listo para su mayor subida semanal desde 2001, según los datos de LSEG. El jueves, Bessent se encogió de hombros ante la renovada agitación del mercado y dijo que alcanzar acuerdos con otros países aportaría certidumbre.
Estados Unidos y Vietnam han acordado iniciar conversaciones comerciales formales, según la Casa Blanca. El centro manufacturero del sudeste asiático está dispuesto a tomar medidas enérgicas contra los productos chinos que se envían a Estados Unidos a través de su territorio con la esperanza de evitar los aranceles, según informó Reuters en exclusiva el viernes.
Por su parte, el primer ministro japonés, Shigeru Ishiba, ha creado un grupo de trabajo sobre comercio que espera visitar Washington la próxima semana. Taiwán dijo que también espera ser incluido en la primera tanda de socios comerciales que mantendrán conversaciones con Washington.
¿Acuerdo sobre aranceles con China?
Trump suspendió repentinamente sus aranceles “recíprocos” a otros países horas después de que entraran en vigor esta semana, pero aumentó los aranceles a las importaciones chinas como castigo por las represalias iniciales de Pekín. Desde su toma de posesión, Trump ha impuesto nuevos aranceles a los productos chinos del 145%, según un responsable de la Casa Blanca.
Dirigentes chinos han estado sondeando a otros socios comerciales sobre cómo hacer frente a los aranceles estadounidenses, hablando recientemente con sus homólogos de España, Arabia Saudí y Sudáfrica.
Trump dijo a los periodistas en la Casa Blanca que pensaba que Estados Unidos podría llegar a un acuerdo con China, pero reiteró su argumento de que Pekín “realmente se ha aprovechado” de Estados Unidos durante mucho tiempo.
“Estoy seguro de que podremos llevarnos muy bien”, dijo Trump, añadiendo que respetaba al presidente chino, Xi Jinping. “En un verdadero sentido, ha sido amigo mío durante un largo periodo de tiempo y creo que acabaremos resolviendo algo que es muy bueno para ambos países”.
China, que ha rechazado lo que calificó de amenazas y chantajes de Washington, restringió las importaciones de películas de Hollywood, apuntando a una de las exportaciones estadounidenses de más alto perfil.
La pausa arancelaria estadounidense tampoco se aplica a las tasas pagadas por Canadá y México, cuyas mercancías siguen sujetas a aranceles del 25% relacionados con el fentanilo, a menos que cumplan las normas de origen del acuerdo comercial entre Estados Unidos, México y Canadá.
Con la persistencia de las hostilidades comerciales entre los tres principales socios comerciales de Estados Unidos, Goldman Sachs estima la probabilidad de recesión en un 45%.
Según investigadores de la Universidad de Yale, incluso con la reducción, el tipo medio de tasas de importación impuesto por Estados Unidos es el más alto en más de un siglo.
La pausa tampoco sirvió para calmar las preocupaciones de los líderes empresariales sobre las consecuencias de la guerra comercial de Trump y su caótica implementación: aumento de los costes, caída de los pedidos y cadenas de suministro paralizadas.
Sin embargo, la Unión Europea anunció que suspendería sus primeras medidas arancelarias. La UE tenía previsto lanzar contraaranceles sobre unos 21,000 millones de euros (23,000 millones de dólares) de importaciones estadounidenses el próximo martes en respuesta a los aranceles del 25% de Trump sobre el acero y el aluminio. Todavía está evaluando cómo responder a los aranceles estadounidenses sobre los automóviles y a los gravámenes más amplios del 10% que siguen en vigor.
Los ministros de Finanzas de la UE debatirán el viernes cómo aprovechar la pausa para lograr un acuerdo comercial con Washington y cómo coordinar sus esfuerzos para hacer frente a los aranceles en caso contrario.
Las autoridades europeas calculan que el impacto de los aranceles estadounidenses en su economía ascendería a entre el 0.5% y el 1.0% del PIB. Dado que, según las previsiones del Banco Central Europeo, la economía de la UE en su conjunto crecerá un 0.9% este año, los aranceles estadounidenses podrían llevar a la UE a una recesión.