Reuters.- Las empresas chinas que venden productos en Amazon se están preparando para subir los precios para Estados Unidos o abandonar ese mercado debido a las subidas de aranceles sin precedentes del presidente estadounidense, Donald Trump, dijeron los vendedores y la directora de la mayor asociación de comercio electrónico de China.
Trump dijo el miércoles que elevaría los aranceles a las importaciones chinas al 125% desde el nivel del 104% que ya está en vigor, lo que aumenta la confrontación de alto riesgo entre las dos economías más grandes del mundo.
“No se trata solo de una cuestión de impuestos, sino de que toda la estructura de costes se ve totalmente desbordada”, dijo Wang Xin, directora de la Asociación de Comercio Electrónico Transfronterizo de Shenzhen, que representa a más de 3,000 vendedores de Amazon.
“Será muy difícil para cualquiera sobrevivir en el mercado estadounidense”, dijo a Reuters y señaló que los aranceles también podrían provocar retrasos en las aduanas y mayores costes logísticos.
“Así que para todos los que estamos en este momento en el negocio del comercio electrónico transfronterizo esto es realmente un revés sin precedentes.”
Aranceles pegan a vendedores de Amazon
Algunos vendedores están tratando de aumentar los precios en Estados Unidos, mientras que otros están buscando nuevos mercados, dijo Wang, unos comentarios respaldados por cinco vendedores de Amazon con sede en Shenzhen entrevistados por Reuters el jueves.
China alberga alrededor de la mitad de los vendedores de Amazon, con más de 100,000 empresas de Amazon registradas solo en la ciudad meridional de Shenzhen, que generan unos ingresos anuales de 35.300 millones de dólares, según el proveedor de servicios de comercio electrónico SmartScout.
China también alberga las bases de fabricación de otras grandes plataformas de comercio electrónico, como Shein y Temu. Las importaciones y exportaciones relacionadas con el comercio electrónico transfronterizo ascendieron el año pasado a 2.63 billones de yuanes (358,000 millones de dólares), según datos del Consejo de Estado chino.
Ningún otro país se acerca siquiera al poder de consumo de Estados Unidos, lo que limita significativamente la producción que el resto del mundo puede absorber y aumenta el riesgo de que se intensifiquen las guerras de precios entre los exportadores chinos, lo que reducirá la rentabilidad.
De los cinco vendedores que hablaron con Reuters, tres dijeron que intentarían subir los precios de sus exportaciones a EE UU, mientras que dos planeaban abandonar el mercado por completo.
Dado el grave impacto sobre las pequeñas empresas y los fabricantes chinos, los aranceles corren el riesgo de provocar una rápida aceleración de la tasa de desempleo en China, dijo Wang.
