El Banco Mundial ha emitido una advertencia contundente sobre las potenciales consecuencias de la imposición de aranceles generalizados del 10% en Estados Unidos, una medida anunciada por el presidente electo Donald Trump. De concretarse, esta política podría reducir en 0.3 puntos porcentuales el ya modesto crecimiento económico mundial del 2.7% proyectado para 2025.
El organismo agrega que el crecimiento de Estados Unidos, estimado en 2.3% para ese año, podría experimentar una contracción del 0.9% bajo estas circunstancias, según simulaciones económicas realizadas por el organismo multilateral.
Los aranceles propuestos por Trump incluyen un 10% a las importaciones globales, un 25% específico para bienes procedentes de Canadá y México como medida punitiva, y un 60% para productos provenientes de China. Estas medidas buscan presionar a otros países para abordar temas como el tráfico de drogas y la migración irregular hacia Estados Unidos. Sin embargo, el Banco Mundial advirtió que estas políticas podrían intensificar las tensiones comerciales y desacelerar la inversión extranjera directa, especialmente en economías en desarrollo.
Por otro lado, el organismo también señaló que la extensión de los recortes fiscales en Estados Unidos podría incrementar su crecimiento en 0.4 puntos porcentuales en 2026, aunque con impactos globales menores. Este panorama contrasta con las perspectivas generales de la economía mundial, que según el informe semestral de Perspectivas Económicas Mundiales del Banco Mundial, mantendrá un crecimiento del 2.7% en 2025 y 2026, similar al proyectado para 2024.
Aranceles y el lento crecimiento de las economías
El reporte subrayó que las economías en desarrollo enfrentan ahora las perspectivas de crecimiento más débiles desde el año 2000. Con un crecimiento estimado del 4% en 2025 y 2026, estas economías muestran un desempeño considerablemente inferior a las proyecciones previas a la pandemia. Factores como la creciente carga de deuda, la reducción en la inversión y el lento avance en productividad, junto con el impacto del cambio climático, están frenando su progreso.
Indermit Gil, economista jefe del Banco Mundial, destacó que “los próximos 25 años serán más desafiantes para las economías en desarrollo que los últimos 25”. La brecha entre países ricos y pobres sigue ampliándose, con tasas de crecimiento per cápita menores en economías en desarrollo, excluyendo a China e India, respecto a las economías avanzadas desde 2014.
En este contexto, el Banco Mundial instó a los países a implementar reformas internas para fomentar la inversión y fortalecer las relaciones comerciales como parte de una estrategia para mitigar los riesgos y asegurar un crecimiento más sostenible en el futuro.
