Por: Jacobo Rodríguez, especialista financiero en Roga Capital

Desde el fin de semana pasado, el presidente de México se pronunció por una reforma al sistema del retiro, muy en específico regresar a un sistema de pensiones; ha lanzado algunos comentarios respecto a que sea el gobierno el que administre los recursos que actualmente tienen las AFORES, que la pensión para el retiro pueda cubrir el 100% del salario de los trabajadores y que las aportaciones del gobierno aumentarían para alcanzar ese 100%.

Es bien sabido que, al actual presidente le gusta estar en los reflectores, siempre siendo protagonista de la escena pública, es por esto por lo que comenta lo que se le viene a la mente por muy incendiario que resulten dichos comentarios. Y no podría ser de otra manera en su último año de gobierno, por nada del mundo quiere que los reflectores apunten a otros personajes, ni siquiera aquellos que serán los protagonistas de las próximas elecciones; pero en fin. Hay que analizar la propuesta.

El sistema de pensiones tiene su fundamento en que los impuestos y las aportaciones de los trabajadores en activo sostengan los gastos de los retirados. Hoy ese esquema es inviable por diversos factores que comentaré a continuación:

• Cambios de la pirámide poblacional. Este es un fenómeno mundial y propio de cada nación que se desarrolla en el tiempo. Como se observa en la gráfica de la derecha, la pirámide se hace más angosta en las edades menores a 40 años, mientras que las edades superiores son más anchas; esto se debe a que la población envejece. Diversos factores se juntan para que esto suceda: las familias tienen menos hijos, los hijos se tienen a edades más tardías, y la esperanza de vida es mayor. Este último punto es muy relevante, en 1950 se tenía una esperanza de vida de poco más de 50 años, para la década de los 80`s era de más de 65 años y actualmente es de 69 años (es importante mencionar que en 2020 la esperanza de vida disminuye por el impacto del COVID y es que la esperanza en 2018 y 2019 rondó los 75 años; se esperaría regresar a esos niveles). Hay un dato muy revelador del Censo de población que se realizó en 2020 por parte del INEGI el cual apunta a que el índice de envejecimiento pasó de 12 en 1970 a 48 personas de 60 años o más por cada 100 infantes menores de 15 años. Es muy claro que la población adulta es cada vez mayor con relación a los nacimientos.

• El bono demográfico se ha perdido. México es uno d ellos países de América Latina en donde el bono demográfico terminará de manera más temprano en comparación de otros países. En el estudio de la CEPAL de 2005 “Una pirámide que exige nuevas miradas”, se estimaba que dicho bono demográfico se terminaría en México para 2020. Muchos académicos consideran que todavía existe ese bono demográfico en nuestro país, pero que se estaría perdiendo en esta década. Esto quiere decir que la población joven ya no es suficiente para sostener a todos los dependientes. Ahora imaginen la carga que significaría tener un sistema de pensiones al 100% para todos los trabajadores que se retirarán en el futuro.
• Mala administración. Se estima que el gasto para las pensiones en este 2024 sea por un monto de 1.99 billones de pesos, cerca del 6.0% del PIB en México. Las AFORES hoy administran recursos por alrededor de 5.5 billones de pesos; por lo que en un lapso de tres años se consumirían los recursos totales de las AFORES. Ya se que no estoy contando lo que actualmente aporta el gobierno, pero al final todo se iría a la misma canasta. Sabemos que los gobiernos son muy malos administradores de los recursos lo cual pone en riesgo los recursos ahorrados por los trabajadores. Tan solo hay que mencionar que para este 2024 la deuda aumentará de manera importante y que se espera un déficit fiscal que no se veía en décadas; eso deja en claro lo presionado que están las finanzas públicas actualmente.

Podemos incluir muchos otros factores que tienen que ver con cuestiones sociales y políticas del porqué no es una buena idea tener un sistema de pensiones con transferencias y que el gobierno sea el administrador; estas van desde el poder político para el partido dominante, la dependencia que se genera al gobierno y el paternalismo que representa un mal general para la población en cuanto a su productividad y propio desarrollo; y un largo etc.

Sin duda, muchas personas quisieran retirarse con el 100% de sus últimos ingresos, pero es mucho mejor tener un sistema de salud que abarque a toda la población y que sea robusto. Sería importante que el gobierno deje de estar proponiendo transferencias directas solo por temas electorales; eso nos costo décadas pérdidas de desarrollo y crecimiento, generó problemas de deuda; el modelo paternalista del gobierno que se observó en el siglo pasado esta regresando, pero esta más que demostrado que solo generó problemas de los cuales tardamos décadas en arreglar. Tener una idea o una ocurrencia no esta mal, el problema esta en que se quiera llevar a cabo sin ni siquiera consultar con los expertos. Hay una frase muy famosa de Goethe: “no hay nada más peligros que un ignorante con iniciativa”.