Elon Musk, CEO de Tesla, informó que la inversión del fabricante automotriz en México quedará suspendida al menos hasta que se conozcan los resultados de las elecciones presidenciales en Estados Unidos.
Las propuestas de política fiscal del candidato republicano Donald Trump han impulsado la decisión. “Creo que tenemos que ver lo que pasa con la elección. Trump ha dicho que pondrá aranceles a los vehículos producidos en México. Así que no tiene sentido invertir mucho en México si eso va a pasar”, declaró el empresario sudafricano.
En marzo de 2023 se confirmó que Tesla construiría una planta de producción y ensamblaje en Nuevo León. Iniciaría operaciones en 2026. El proyecto recibió subvenciones del gobierno de Nuevo León, liderado por Samuel García. El proyecto se retrasó en diciembre. Musk argumentó entonces que el aplazamiento respondía a los elevados tipos de interés. El funcionario regiomontano dijo a principios de este año que la construcción de la planta comenzaría en marzo.
Tesla en medio del efecto Trump
El también propietario de la red social X ha declarado su apoyo a Trump. Informes señalan que se ha comprometido a donar hasta 45 millones de dólares mensuales en beneficio de su campaña electoral.
“En estos momentos nos oponemos a Giga México. Necesitamos ver cómo las cosas se desarrollan políticamente”, añadió Musk. Señaló que Tesla está aumentando su producción en las factorías existentes. Puntualizó que productos de nueva generación como el robotaxi y el robot humanoide Optimus serán producidos en la planta de Texas.
El resultado de las elecciones presidenciales de Estados Unidos es un factor que causa incertidumbre en el ámbito empresarial. Trump se mantiene a la cabeza en las encuestas. La reciente retirada de Joe Biden, candidato demócrata, ha incrementado las preocupaciones.
El discurso extremista de Donald Trump y su equipo ha puesto en duda las relaciones comerciales que Estados Unidos tiene con países como México. “Cuando estaba en cuarto año de primaria, un político de carrera llamado Joe Biden apoyó el TLC (ahora T-MEC). Es un mal acuerdo comercial para Estados Unidos que causó que buenos empleos manufactureros estadounidenses se fueran a México”, dijo la semana pasada J.D. Vance, senador de Ohio y candidato republicano oficial a la vicepresidencia. Los analistas advierten que los comicios de noviembre podrían reconfigurar las oportunidades que el nearshorig supone para la economía de México.
