El gobierno del presidente Donald Trump ha iniciado medidas concretas para reducir las barreras regulatorias en el sector de las criptomonedas. Este martes, la Comisión de Bolsa y Valores (SEC, por sus siglas en inglés) anunció la creación de un “grupo de trabajo sobre criptomonedas” liderado por Mark Uyeda, su presidente interino, con el objetivo de desarrollar un marco regulador claro y completo para los criptoactivos.
En su comunicado oficial, la SEC indicó que la misión principal del grupo será diseñar lineamientos específicos para regular las criptomonedas. Además, buscará colaborar con el Congreso para establecer normativas que ofrezcan mayor certeza a las empresas y usuarios de este creciente sector.
Trump, quien durante su campaña se autoproclamó como un “presidente cripto”, ha prometido revertir las políticas del gobierno anterior en relación con las monedas digitales. Bajo la administración de Joe Biden, varias empresas del sector, como Coinbase y Kraken, enfrentaron demandas de la SEC por supuestos incumplimientos regulatorios. Dichas empresas han argumentado que el marco regulatorio existente no se ajusta a las particularidades del sector y carece de claridad para fomentar la innovación.
Las ambiciones de Trump en el sector de las criptomonedas
En una entrevista reciente, Uyeda destacó que la nueva estrategia busca equilibrar la supervisión con el desarrollo del sector. “Es fundamental establecer reglas claras que promuevan la transparencia y la confianza sin sofocar la innovación”, señaló el funcionario, quien asumió el liderazgo de la SEC este lunes.
La creación del grupo de trabajo ha sido bien recibida por los actores de la industria cripto, quienes ven en esta iniciativa una oportunidad para avanzar hacia una regulación más moderna y adecuada a las necesidades del mercado. Hester Peirce, comisionada republicana de la SEC y conocida por su apoyo a las criptomonedas, también respaldó la medida, calificándola como “un paso necesario para brindar certeza jurídica al ecosistema digital“.
El impacto del anuncio no tardó en reflejarse en el mercado. El bitcoin, la criptomoneda más conocida, experimentó un incremento del 2.4% en su valor, superando los 106,000 dólares tras conocerse la noticia.
Con este primer movimiento, la administración Trump busca posicionarse como un aliado de la innovación tecnológica, marcando un cambio significativo en la política estadounidense hacia las criptomonedas. La industria espera que este enfoque impulse el desarrollo del sector y reduzca las tensiones regulatorias que habían dominado en años anteriores.