Reuters.- Un partido conservador de Brasil busca revocar la prohibición impuesta por un juez a la plataforma X de Elon Musk, lo que podría agravar la disputa de varios meses sobre la censura y la incitación al odio en el país más grande de Sudamérica.
El recurso presentado por el Partido Novo contra la decisión del juez del Supremo Tribunal Federal Alexandre de Moraes de prohibir la popular red social será examinado por otro magistrado, lo que complica la disputa con el imperio empresarial del multimillonario.
“Se trata de la libertad de expresión: queremos que X vuelva a la normalidad en Brasil”, dijo a Reuters Jonathan Mariano, fiscal federal y candidato del Partido Novo al ayuntamiento de Río de Janeiro.
Moraes ordenó la semana pasada el bloqueo de X en su sexto mayor mercado después de que la plataforma, antes conocida como Twitter, incumplió las órdenes de bloquear algunas cuentas acusadas de difundir “noticias falsas” y mensajes de odio que, según el juez, constituían una amenaza para la democracia.
También congeló los activos de la firma de banda ancha por satélite Starlink de Musk para su posible uso para pagar multas adeudadas por X.
Musk, que ha llamado “dictador” a Moraes, le acusó de “cerrar la fuente número 1 de la verdad en Brasil”. X ha cerrado sus oficinas en Brasil por lo que calificó de “censura” por parte del juez.
El Partido Novo solicitó esta semana una orden judicial para detener la prohibición de Moraes a X, alegando que era inconstitucional. El partido también cuestionó la congelación de los activos de Starlink, argumentando que las dos empresas son entidades separadas.
Moraes declinó hacer comentarios el miércoles sobre las impugnaciones del partido. Musk, su abogado y Starlink no respondieron a las repetidas peticiones de comentarios esta semana.
Impugnación contra la suspensión de X avanzaría rápido
La solicitud del Partido Novo será tomada por el juez Kassio Nunes Marques, quien fue nombrado por el expresidente de extrema derecha Jair Bolsonaro. Se espera que lleve el caso a un tribunal más amplio o que lo desestime.
No se ha fijado una fecha para la decisión, pero se espera que Marques actúe con rapidez, dadas las repercusiones de los movimientos de Moraes contra las entidades de Musk. No fue posible contactar inmediatamente a Marques para que hiciera comentarios.
Musk, además de ser propietario de X y del 40% de la matriz de Starlink, SpaceX, es el presidente ejecutivo del gigante de los vehículos eléctricos Tesla.
El presidente izquierdista de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, ha respaldado la decisión de Moraes de suspender a X, afirmando que “el hecho de que un tipo tenga mucho dinero no significa que pueda faltar al respeto” a la ley. Musk se burló del presidente calificándolo de “perrito faldero” de Moraes.
La decisión de Moraes fue respaldada por uno de los dos paneles del Supremo Tribunal Federal, aunque algunos expertos dijeron que debería haberse buscado un consenso más amplio.
“Una cuestión tan controvertida debería haber sido debatida por los 11 jueces, no sólo por la mitad de ellos”, dijo la abogada constitucionalista Vera Chemim, con sede en Sao Paulo, quien argumentó que el caso se reduce a una batalla por el poder entre Musk y Moraes.
Chemim dijo que la congelación de las cuentas de Starlink viola la ley brasileña y debe ser revocada inmediatamente.
Pero el expresidente del Supremo Tribunal Federal Carlos Ayres Britto no estuvo de acuerdo. “X y Starlink son tentáculos del mismo pulpo, forman un grupo económico”, dijo.
El Partido Novo no es el único que cuestiona la decisión de Moraes. El Colegio de Abogados de Brasil también ha pedido al Supremo Tribunal Federal que anule la orden de Moraes de multar a los brasileños con 50.000 reales (8.900 dólares) al día por utilizar VPN (redes privadas virtuales) para acceder a X en el país.
La asociación argumentó que la imposición de multas viola los principios constitucionales de separación de poderes, defensa plena y debido proceso.